Vivamos para ser eternos
Acuérdate mundo…
que fui de tierra… de arena.
Acuérdate mundo que amé tu cuerpo…
y tu existencia
que yo existí dentro de tu esencia.
Acuérdate mundo que fui de agua…
que fuimos dos
que fui beso… fui carne…
que fui mujer…
acuérdate mundo que me alimenté
de abrazos y de luna
acuérdate que el sol
me dio energía y me transformó la piel
para tocarte.
Acuérdate que amé mundo,
porque no fui más que hierba enredada en tu tronco.
Acuérdate mundo…
que perdí forma amándote
porque amar
me llevó a mi estado original.
Acuérdate mundo
y no dejes de acordarte…
para que seamos eternos.
17-2-75
Sueño
Como una sorpresa…
Como voces que te llaman por detrás…
Como de repente…
Como llamas a lo lejos…
y los ojos se mueven por dentro…
en la realidad situaciones diferentes…
y más lejos es por casualidad…
y es solo por un instante que estoy aquí…
En rieles
Una noche sombría.
El tren atraviesa despacio…
los colores dormidos de la luna escondida
las palabras leves
y los movimientos ansiosos
los hombros arrecostados
y el pensamiento despierto
las risas del juego
y el ruido de los rieles
los extraños que preguntan
en el camino del tiempo.
10 de noviembre de 1977, en el tren de París-Londres
La tarde
Trae recuerdos
Trae nostalgias
Se funden las pasiones
El alma se agiganta
Se enciende el brillo de los colores
Descansa mi cuerpo y mi espíritu…
Se funde el día con la noche
Se calman las aguas del océano
Se rinde el sol ante la luna.